Mis ignorancias fabrican torres de viento

I 


Los poetas muertos 
me copian 
me plagian 
me roban 
me espían 
llevan dos mil años 
contando 
escribiendo 
adivinando 
anticipando 
mis libros. 
Llame 
a Propercio, 
señor juez, 
que deje 
de copiar a Batania, 
señor juez, 
su Cintia 
es un remedo 
de Iratxe, 
señor juez, 
escúcheme, 
señor juez. 


II 


O sigues el curso de las cosas
o te rebelas.

Yo me rebelé.

Desde entonces
una sirena loca
 

atraviesa mis venas,
y nunca logro
 

distinguir 
si es
de ambulancia
o de policía.
 



Mayo 2008