solo libertad

Frecuente y triste historia
la del poeta elegido,
afable y partenonio,
nacido entre cornalinas
y el ocho de la abundancia,
humilde con aeroplano,
matrícula en la solapa,
mezclado en polietileno
y clases particulares,
laborioso, aplicado,
brillante, con facultades,
de familia democracia
y viajes alejandrinos,
erasmus, griego, piano,
biblioteca centenaria,
a salvo de taras físicas
o relámpagos sexuales,
un muchacho inmaculado,
un muchacho ejemplar,
un orgullo y un modelo
que,
sin
embargo,
todavía no ha firmado
una sola línea propia,
un solo verso distinto,
una púa de talento,
y sus trivios y cuadrivios
solamente le han servido
para nada que decir,
su gramática exacta
para nada que decir,
nada sabe del sufriendo,
nada sabe del llorando,
no tiene resentimientos,
nunca hambres ni violencias,
ningún afán de venganza,
qué cosa sea el miedo,
le falta semen, el semen...